Úrsula García es una de las co-fundadoras de la productora The Frank Barton Company, uno de los estudios de referencia en la dirección y producción de obras de animación para publicidad.
Visitó la escuela y explicó a los asistentes de su masterclass los beneficios del uso de este tipo de proyectos a la hora de crear imagen de marca.
No te pierdas la entrevista y descubre un poco más sobre esta industria.
The Frank Barton Company es un estudio de animación que tiene sus inicios en el 2008. Sois varios los fundadores de la empresa que anteriormente formabais equipo en otra productora. ¿En qué momento decidisteis dar el paso y crear vuestra propia compañía?
Fundamentalmente nos empujó la idea de seguir trabajando juntos en el largo plazo. Queríamos crear un hábitat que nos permitiese aprender y evolucionar como equipo.
En un sector que cuenta con un gran número de productoras y freelances que trabajan por su cuenta, ¿fue complicado abrirse un hueco?
Desgraciadamente en España el tejido industrial en el mundo de la animación es más pequeño de lo que nos gustaría. La dificultad del día a día no está en la competencia, que pensamos es enriquecedora, la dificultad está quizá en que trabajamos como estudio de animación especializado en publicidad en un nicho de producción que es poco conocido, en donde no se comprenden bien los procesos de producción y los costes necesarios para producir a determinadas calidades, que por otro lado todo el mundo conoce bien porque todos vamos al cine. Pero las posibilidades creativas en animación son enormes, en otros países el uso de la animación en el mundo publicitario es mucho más amplio que aquí. Poco a poco, espero.
Vosotros veníais de un área totalmente creativa, ¿teníais conocimientos a nivel empresarial antes de lanzaros a crear The Frank Barton Company?
No, ninguno de nosotos tenía formación en empresa. Hemos aprendido mucho en estos 10 años.
En la masterclass nos explicaste la importancia de tener buenos clientes con los que formar un entorno laboral favorable y trabajar de manera periódica. ¿Cómo se consigue crear esa afinidad con un nuevo cliente?
Tratamos de ser honestos con nuestro trabajo, para nosotros es importante que nuestros clientes estén cómodos durante el proceso de producción, ir avanzando de la mano y que se queden satisfechos. Somos muy autocríticos y los objetivos de calidad que planteamos pasan por entregar lo mejor que sepamos hacer en ese momento. Nos daría mucha vergüenza lo contrario.
Vuestro equipo de trabajo está formado por distintos profesionales que participan en el proceso de creación de las animaciones. ¿Qué tipo de perfiles nos podemos encontrar en The Frank Barton Company?
En el estudio los perfiles están muy especializados. En cada spot, a una escala inferior, cubrimos una buena parte de los perfiles que nos encontraríamos en una película de animación: diseño de personajes y concepts, animatics, color scripts, rigging, animación, lighting, compositing…
La dirección de vuestros proyectos es firmada bajo el nombre de la agencia, no de manera individual, ¿por qué decidisteis tomar esta decisión?
Firmamos los spots con el nombre colectivo de The Frank Barton Company. Nos parece una fórmula que reconoce el trabajo del conjunto, de todo el equipo involucrado. En cualquier caso, lo que podríamos llamar la visión del director existe, en cuanto a que hay una dirección creativa en cada proyecto que coordinamos en tándem Sergio García y yo.
A nivel personal, ¿cuál ha sido tu evolución para terminar consiguiendo los logros que has tenido durante tu carrera? ¿Cómo empezaste en el mundo de la animación?
Empecé en la Universidad Complutense en el año 91, en un taller de imagen por ordenador que formaban un grupo pequeño de estudiantes en el sótano de la facultad. Todo era muy artesanal y muy autodidacta. No sabíamos usar los equipos y se rompían, pero sacamos adelante un par de piezas graciosas, un experimento inter-universitario que se presentó en el Siggraph del 92 y después un corto en 3D que de alguna forma ayudó a que la mayoría encontrásemos un hueco profesional en el negocio.
Para finalizar, ¿qué consejo le darías a los estudiantes que tienen como meta trabajar en un entorno profesional como The Frank Barton Company o que piensan en formar su propia agencia?
Que hagan su propia bobina, que tengan cosas que presentar que les diferencien y que fijen criterios de calidad elevados. Que busquen gente afín con quien sacar adelante proyectos que les hagan ilusión para que entre todos sigamos tejiendo un entorno profesional y artístico en el que intercambiar conocimientos y avanzar en proyectos que puedan unirnos.
Visita nuestros cursos del área de 3D y animación e inicia el camino a tu futuro profesional.
