El pasado sábado, 6 de mayo, tuvimos la suerte de contar con Pepe Cruz Novillo Jr. en una Masterclass presencial en nuestra Escuela. Y, la verdad, fue toda una maravilla descubrir todo el recorrido de mucho de los trabajos creados en el estudio Cruz más Cruz, estudio que codirige con su padre, el escultor y diseñador, Cruz Novillo, el hombre que diseñó España. Muchos de sus diseños, logos como el de Correos, Renfe o Antena 3, han pasado a formar parte de la cultura y a día de hoy siguen en el imaginario colectivo de la sociedad.
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Entrevista a Pepe Cruz Novillo Jr. en Trazos
Cruz Novillo fue uno de los principales precursores del cambio de imagen que dio España en la Transición. Creó la nueva identidad y dio imagen a numerosas empresas. ¿Cómo enfrentó esta oportunidad ?
Por lo que él me ha contado rememorando sus inicios, llega a Madrid en el año 1958, desde un pequeño pueblo de Cuenca, de Motilla de Palancán, para estudiar Derecho y hacer la mili. Y resulta que se cruza la posibilidad en su vida de trabajar en una agencia de publicidad. Abandona sus estudios y el 9 de noviembre de 1958, entra a trabajar en una agencia de publicidad de Madrid que se llamaba Publicidad Clarín. Tenéis que pensar que por entonces no existía en España la palabra diseñador. Se les llamaba dibujantes de publicidad, ni siquiera creativos, básicamente grafistas en el mejor de los casos. Entonces, estos pioneros que empiezan con estas actividades en España se encuentran con que estaba todo por hacer y eso fue una ventaja muy grande para ellos. Primero, porque eran muy pocos, buenos eran todavía menos y las empresas, instituciones que necesitaban dotarse de una identidad eran prácticamente todas. Por lo tanto, tuvieron desde el principio muchísimo trabajo.
«Los pioneros que empiezan con estas actividades en España se encuentran con que estaba todo por hacer y eso fue una ventaja muy grande para ellos.»
¿Cuál dirías que es la formula para que los diseños de Cruz Novillo, como la bandera de la Comunidad de Madrid o el logo del PSOE, hayan perdurado intactos hasta el día de hoy?
Yo lo resumiría con una palabra que es calidad. Es decir, es el mismo motivo por el que nos siguen pasmando las pirámides de Egipto o el Empire State de Nueva York. Creo que son obras de la humanidad que tienen calidad desde el momento en el que son concebidas. Y si a eso le unes, además, el que son trabajos que no están realizados con arreglo a las tendencias del momento, a las modas, sino a criterios mucho más objetivos de perdurabilidad, de dar el mejor servicio posible al cliente, de reductibilidad, de facilidad de aplicación en distintos soportes, de cosas que curiosamente ahora en la actualidad están otra vez en boga con las nuevas tecnologías digitales y que en el fondo siempre han sido así. Pues si juntas todo eso en una coctelera con una dosis gigantesca de talento, por supuesto, en el caso de Cruz Novillo, el resultado tiene que ser necesariamente bueno y tiene que ser necesariamente también perdurable. Es más, yo hablaría de que muchos de los trabajos, y algunos de ellos los vamos a ver hoy, han sido sustituidos de manera innecesaria, y yo diría que en todos los casos, por trabajos de menor calidad que aquel al que sustituían.
Desde vuestro estudio habéis presenciado la evolución del Diseño en España desde 1963 hasta hoy, ¿cómo dirías que ha evolucionado el Diseño en los últimos 60 años?
Afortunadamente desde hace como mínimo 40 años la evolución está siendo más o menos paralela a la que se está produciendo en los países más desarrollados de Europa y Estados Unidos. Antes no, claro. La España, digamos, todavía de la dictadura, tenía un aislamiento también desde el punto de vista de la creación que hacía que lo que se hacía en España fuera claramente de menor nivel. Y sin embargo, desde entonces, vamos a ponernos si quieres en los primeros 80, me parece que el trabajo de los creadores españoles está a un nivel absolutamente equiparable al de los mejores países del mundo. Y eso se está notando en los concursos que se ganan desde España, en los trabajos para instituciones extranjeras. Y luego se ha producido en los últimos, yo diría, 20 años una segunda revolución. Tiene que ver, lógicamente, con la entrada de lo digital en nuestras vidas, pero que ha permitido seguramente también gracias a las RRSS, que haya diseñadores muy jóvenes siendo ahora mismo mundialmente conocidos y trabajando a nivel mundial gracias a la difusión que estas redes se han permitido dar a sus trabajos.
En cuanto a branding, ¿cómo abordáis la tarea de crear diseños que reflejen los valores y personalidad de las marcas?
Bueno, hay un aspecto fundamental que es la interlocución con el cliente, es decir, el cliente sabe mucho más de su empresa, que tú. El respeto del cliente tiene que ser enorme, porque así como él cuenta contigo, porque entiende que tú sabes más de lo tuyo, tú tienes que entender que el cliente sale mucho más de lo suyo. Por lo tanto, lo ideal, lo que hace que los trabajos al final salgan bien, es que la comunicación con el cliente sea buena, y que haya confianza mutua. Esa es básicamente la clave.
Luego hay una serie de aspectos técnicos que tienen que ver con lo que decía antes, con la implantación, la reductibilidad, la reproductibilidad, aspectos canónicos del diseño que mucha gente olvida. Pero que ahora empezó con el entorno digital eso aún es más decisivo. Entonces, cuando todo eso se pone de acuerdo y rema en la misma dirección, el trabajo tiene que salir bien necesariamente.
¿Qué consejos les darías a nuestros estudiantes de Diseño que van a salir al mercado laboral?
Bueno, más que consejo, les diría que no se han equivocado de carrera, es decir, que tengan toda la paciencia necesaria, que por supuesto es un oficio muy difícil, pero que se están dedicando al mejor oficio del mundo. Yo, de verdad, a veces digo en broma que me da pena la gente que se dedica a otra cosa. Voy a una Farmacia, me ponen unas aspirinas y digo «pobre, farmacéutico». Voy a un notario y firmo una escritura, y digo: «pobre notario». No saben lo que se están perdiendo, pudiendo sentarse delante de la mesa, de un papel, de un ordenador, a intentar resolver un problema de identidad corporativa, a intentar mejorar la manera que nos sentamos en la silla, a intentar que el coche sea más aerodinámico, que el cohete llegue a la luna, que la caratula del disco haga que se vendan más vinilos, ¿no? Es lo más bonito del mundo, por lo tanto, todo lo demás es pasajero, los momentos malos o regulares, porque al final siempre los buenos van a prevalecer.
Y hasta aquí la entrevista a Pepe Cruz Novillo Jr. Queremos dar las gracias a Pepe por haber traído a la Escuela un trocito de la historia del Diseño más reciente de este país y por haber compartido el proceso de creación de cada uno de los logotipos e identidades que han marcado un antes y un después en el branding en España. ¿Te gustaría empezar tu camino como diseñador gráfico y empezar a desarrollar proyectos de branding increíbles? Entonces… ¡nuestras formaciones en Diseño Gráfico son para ti!