Cuando realizamos un diseño para una marca, un proyecto publicitario o creamos una marca de cero es muy importante elegir la mejor tipografía para que nuestro mensaje se comunique de la manera más efectiva. Y es que no solo las palabras expresan lo que queremos comunicar, también la familia tipográfica que utilicemos, su forma o incluso la combinación de diferentes tipos pueden expresar mucho sobre una marca. En este post queremos descubrirte algunas de las curiosidades que se esconden tras la tipografía y que aprendas cómo realizar un estudio tipográfico para cualquier diseño. ¡Allá vamos!
Familias tipográficas
Existen miles y miles de tipografías diferentes en todo el mundo, pero todas y cada una de ellas se pueden agrupar en cuatro grandes familias tipográficas, que acogen características similares. Conocer y diferenciar cada una de estas familias es primordial para elegir la mejor tipografía para tu proyecto. ¡Aquí vas a conocerlas!
Familia Serif
La familia serif o con serifa representa al grupo de tipografías que tienen remates característicos, llamados serifas. ¿Qué es una serifa? Simplemente son los adornos estéticos que se añaden a las terminaciones de estas letras como, por ejemplo, al pie de cada una de ellas.
Si analizamos la anatomía de una letra, el pie es la parte inferior, que se suele apoyar sobre la línea base (la línea base hace referencia a la línea donde descansan las letras a la hora de escribir). Aunque dos letras pertenezcan a una misma familia tipográfica, como es el caso de Times New Roman y Zen_Antique_Soft, los pies de estas letras pueden ser muy, muy diferentes. Atento a la siguiente clasificación de adornos para las tipografías con serifa:
- Clásico
- Cuadrangular
- Filiforme
- Lobulado
- Rectilíneo
- Insinuado
Clasificación de tipos de adornos para familias con serifas
Familia Sans Serif
Esta familia, también llamada sin serifas o de palo seco, representa a ese grupo en el que las letras no tienen ningún tipo de decoración final ni adorno, es decir, suelen ser rectas y bastante simples en cuanto a su estética.
Familia Display
Esta familia se caracteriza por ser tipografías de grandes formatos. Se suelen utilizar en carteles, titulares grandes, etc., ya que son formatos que no pueden utilizarse en pequeño debido a su gran volumen.
Familia Script
O manuscrita. Son las que suelen simular la escritura de una persona de manera fluida y natural, tal y como escribe una persona con un bolígrafo o una pluma. Suele utilizarse sobre todo para detalles y pequeñas partes de un texto, ya que (aunque hay muchas diferentes) no tienen muy buena legibilidad.
Existen otras familias tipográficas como Didot, Monoespaciado o Stencil, pero no son tan utilizadas como las cuatro anteriores que hemos desarrollado en este post.
Psicología de la tipografía
¿Qué significa todo esto de la psicología de la tipografía? Nada más y nada menos que la tipografía transmite. Y mucho. Cada familia puede expresar muchos conceptos diferentes. Por eso, es importante conocer esta psicología, para poder elegir la mejor tipografía para nuestro proyecto de diseño.
Psicología de la familia Serif
Este grupo representa tipografías formales, sofisticadas y elegantes. Son ideales para desarrollar proyectos o marcas premium y clásicas.
Psicología de la familia Sans Serif
La tipografía sin serifas son principalmente geométricas y se basan en la simplicidad y la limpieza. Pueden usarse para todo tipo de marcas o proyectos, ya que suelen ser muy versátiles.
Psicología de la familia Display
Sin duda son las más contundentes a la hora de comunicar un mensaje. Como ya hemos explicado antes, se utilizan sobre todo para grandes formatos y mensajes de pocas palabras. Tienen gran personalidad y pueden usarse para dar un toque premium a nuestros diseños.
Psicología de la familia Script
Representa los mensajes de manera cercana, fluida y cálida. Aunque, su legibilidad es baja, se considera bastante atractiva a los ojos de cualquier consumidor.
Trabajo realizado por Andy Díaz en el Máster en Diseño Gráfico
Consejos para elegir la mejor tipografía
A la hora de realizar un estudio tipográfico para elegir la mejor tipografía para nuestro proyecto, debemos tener una serie de conceptos o criterios para que nuestra comunicación vaya exactamente por donde nosotros queremos.
En primer lugar, si estás desarrollando una identidad de marca debes saber que utilizar solo una tipografía no es suficiente. Debes combinar, al menos, dos que tengan diferencias visuales. Por ejemplo, lo suyo sería intercalar en tus diseños una de palo seco con otra que tenga serifas. De esta forma conseguirás que tus diseños tengan contraste y no sean siempre iguales, pero manteniendo un patrón en la identidad. A su vez, las tipografías que elijas deben tener la mayor cantidad de pesos posibles, es decir, deben tener su formato regular, italic, bold, etc. Cuantos más pesos tenga una misma tipografía mejor será.
A la hora de enfrentarte ante un proyecto de identidad de marca y si quieres ser un diseñador profesional debes tener siempre en tu equipo una buena selección de tipografías. Escoger cinco que sean las que más se adapten a la idea de tu proyecto y hacer diferentes pruebas con mayúsculas, minúsculas y todas sus combinaciones, hasta dar con la que más se adapte a tu proyecto.
Trabajo realizado por Cristóbal Bravo en el Máster en Dirección de Arte
También debemos tener en cuenta conceptos como las cursivas, que dan energía a nuestro mensaje, las mayúsculas que transmiten autoridad y firmeza, evitar los subrayados o el justificado centrado, ya que siempre es mejor justificar a la izquierda ya que facilita la lectura.
En definitiva, son muchos los aspectos a tener en cuenta a la hora de elegir una tipo para cualquier proyecto, pero teniendo en cuenta estos aspectos básicos harás una buena elección al 100%.
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